Siempre tuve por el Padre Ángel una admiración y cariño especial. Este documental no ha hecho más que acrecentar en mi la figura de este excepcional hombre.
Comienza el 2022, año de cambios. Pensemos hasta donde hemos llegado y donde queremos continuar. Suerte a todos en vuestra reflexión y animaros a encontrar en la solidaridad vuestro/nuestro destino.
Con cariño, Antonio Afrucha.